Tonolec es una banda que hace fusión de música toba con electrónica. Yo no los conocía ni a ellos ni a la música toba, así que fui sin prejuicios ni expectativas. El recital era en Vaca Profana, una especie de club de amigos/centro cultural/llamalo "h", que es muy chiquitito. Nos sentamos en una mesa, pedimos comida y a esperar...
De repente apareció Tonolec: Chago Bogarín y Diego Pérez. Yo no soy lesbiana- no estoy ni cerca de serlo- pero si algún día por las vueltas de la vida me toca convertirme, voy a buscar a esta Charo adonde sea. ¡Nunca vi algo igual! Es una especie de DIOSA indígena con más gracia que nadie. Encima canta y canta bien. En serio, por suerte fui con amigas y no con un pibe, porque no hubiera tolerado los celos. Diego se encarga del teclado y la computadora y tiene mucha onda también. Nuria Martínez fue la artista invitada.

Por la foto se darán cuenta de que los instrumentos no son los de siempre y la voz de Charo sube y baja como la de Dolores O'Riordan (The Cranberries). Es algo que no estamos acostumbrados a escuchar y a mí me gustó muchísimo. Yo estoy harta de escuchar siempre lo mismo, o variantes de lo mismo, y esto es diferente. Sin embargo, en mi grupo hubo opiniones dispares. Digamos que éramos 2 contra 2. Dos felices felices y dos que hubieran preferido que el recital fuera más corto, porque se les hizo un poco repetitivo.
En fin, esta música no es para todos, eso seguro, pero el que quiera conocer algo nuevo puede averiguar porque en abril van a tocar un par de veces más (tonolec@gmail.com).
De repente apareció Tonolec: Chago Bogarín y Diego Pérez. Yo no soy lesbiana- no estoy ni cerca de serlo- pero si algún día por las vueltas de la vida me toca convertirme, voy a buscar a esta Charo adonde sea. ¡Nunca vi algo igual! Es una especie de DIOSA indígena con más gracia que nadie. Encima canta y canta bien. En serio, por suerte fui con amigas y no con un pibe, porque no hubiera tolerado los celos. Diego se encarga del teclado y la computadora y tiene mucha onda también. Nuria Martínez fue la artista invitada.
Por la foto se darán cuenta de que los instrumentos no son los de siempre y la voz de Charo sube y baja como la de Dolores O'Riordan (The Cranberries). Es algo que no estamos acostumbrados a escuchar y a mí me gustó muchísimo. Yo estoy harta de escuchar siempre lo mismo, o variantes de lo mismo, y esto es diferente. Sin embargo, en mi grupo hubo opiniones dispares. Digamos que éramos 2 contra 2. Dos felices felices y dos que hubieran preferido que el recital fuera más corto, porque se les hizo un poco repetitivo.
En fin, esta música no es para todos, eso seguro, pero el que quiera conocer algo nuevo puede averiguar porque en abril van a tocar un par de veces más (tonolec@gmail.com).